La marcha sobre Roma.

Mussolini era hijo de un herrero de ideas socialistas y tuvo una educación anticlerical y antimilitarista. Fue director del periódico ¡Avanti!, periódico oficial del Partido Socialista en el que había ingresado en 1900. Fue expulsado de este partido por estar a favor de la intervención de Italia en la I Guerra Mundial, entonces fundó su propio diario: Il Popolo d’ Italia, de carácter ultranacionalista. En el turbulento ambiente del Milán de la posguerra, Mussolini fundó los Fascios Italianos de Combate en marzo de 1919. Eran escuadras uniformadas con camisas negras, reclutados entre ex oficiales del ejército, pequeños burgueses arruinados, obreros y campesinos sin trabajo..., que se dedicaban a atacar violentamente a los sindicatos obreros y partidos de izquierdas, socialistas y comunistas. Este movimiento de carácter nacionalista, antiliberal y antisocialista consiguió el apoyo de la mayoría de las clases de la sociedad italiana. Tomó su nombre de las fasces, un antiguo haz de varas que portaban algunos magistrados de la Roma antigua. El fascismo abandonó su ideología republicana para ganarse la confianza del Ejército y de la monarquía. Su actividad se extendió por las zonas rurales, donde los Camisas negras conseguían el respaldo de los terratenientes, mientras atacaban a las ligas de campesinos y a las asociaciones socialistas. También por las ciudades industriales. En 1922, Mussolini y sus camisas negras aplastaron con violencia una huelga general llevada a cabo por los sindicatos. Mussolini, que sólo contaba con 22 diputados de un parlamento de 500, exigió al rey Víctor Manuel III que le concediera el cargo de primer ministro. Para presionar al rey, Benito Mussolini amenazó con una Marcha sobre Roma con sus ya 300.000 camisas negras, que llegó a realizar simbólicamente el 28 de octubre de este año. Esta marcha sobre Roma se llevó a cabo con el objetivo deconseguir el poder, ya que lo que quería demostrar era que tenía el apoyo de gran parte de la población italiana. El 29 de octubre, un día después de La marcha sobre Roma, el rey Víctor Manuel III, quien se vio presionado por los grandes latifundistas, industriales y la mayoría de los mandos del Ejército, invitó a Mussolini a formar gobierno. Este formó un gobierno dictatorial, apoyado por las más importantes personalidades italianas, quienes creían que este tipo de gobierno acabaría con las revueltas obreras y campesinas, y mantendría sus privilegios. La población por su parte intentó encontrar en el nuevo gobierno una solución a la grave crisis económica que se daba en Italia desde el final de la I Guerra mundial. Así comenzó una larga etapa de dictadura para Italia.