El 30 de julio de 1789 Alejandro Malaspina, un marino italiano, al servicio de la Armada Española, parte desde el puerto de Cádiz, para realizar una gran expedición científica y política.
Su viaje fue experiencia largamente meditada y preparada. La aprobación para la realización de la expedición lleva fecha de 14 de octubre de 1788; como en la práctica totalidad de las expediciones ilustradas, los informes políticos tendrían el carácter de secreto. Ciencia y política viajan juntas en todas las expediciones sólo la ciencia será visible, el trasfondo más importante se ocultará bajo la inmensidad del mar océano.
Una vez aprobada, se puso en marcha. Se construyeron dos nuevas embarcaciones de guerra, llamadas Descubierta y Atrevida, ambas expulsadas de La Carraca en 1789, que irían dirigidas hacia el Río de La Plata. Se consultó a quienes en nuestro país o en los de nuestro entorno tenían conocimiento o experiencia sobre viajes transoceánicos.
Se obtuvo la mayor información posible de los archivos estatales, se revisaron los fondos de Indias, el perteneciente a los expulsos jesuitas y el fondo de Temporalidades. Se adquirió el instrumental científico-técnico o se hizo construir ex profeso, en los talleres de Londres y París, también en algunas casas de Madrid y, por supuesto, en el Observatorio de la Marina de Cádiz.
Objetivos:
- Levantamientos cartográficos en las costas de América, Islas Sandwich, Filipinas, Australia, y Nueva Zelanda.
- Redactar informes de los territorios visitados sobre trazados de puertos, estadísticas del comercio y producciones.
- Estudios etnográficos y de Historia Natural.
La expedición toca Montevideo, Puerto Deseado, las Malvinas y dobla el Cabo de Hornos. En febrero arriban a la isla de Chiloé y se separan: la Descubierta se dirige a la isla de Juan Fernández; la Atrevida, a Valparaíso.
Reunidas de nuevo ambas naves, emprenden la navegación hacia el puerto de El Callao, en Perú. Viajan en las corbetas pintores y naturalistas, para plasmar todo lo que van a ver y recoger muestras de especies. También dibujan escenas sobre la vida en las colonias.
En septiembre parten de El Callao, tocan Guayaquil y se dan a la vela rumbo a Panamá. En diciembre se separan. La Atrevida se dirige a Acapulco, la Descubierta a Nicaragua. En mayo de 1791 se encaminan a la costa noroeste norteamericana, territorio apenas explorado.
La expedición fondea en el puerto de Nutka y toma contacto con los indígenas. Allí exploran las islas, realizan mediciones, excursiones botánicas y recopilan datos. El jefe indio Macuina ratifica una anterior cesión de terreno a la Corona. Es importante dejar constancia de la presencia española, pues estas tierras son ambicionadas por rusos e ingleses.
Desde la costa Noroeste vuelven a Acapulco, para partir hacia las Marianas en diciembre de 1792. En marzo llegan a Filipinas. En diciembre recorren Australia y en febrero de 1793, Nueva Zelanda. En junio inician el viaje de vuelta, tocando El Callao, Chile y Montevideo. En septiembre arriban por fin a Cádiz, trayendo consigo innumerables datos y muestras de gran valor científico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario